Jóvenes latinoamericanos en Villa Clara resaltan impacto de la Cumbre de la CELAC

Jóvenes latinoamericanos que se preparan en Villa Clara como médicos,  manifestaron el orgullo de vivir en nuestras tierras del Sur y presenciar en Cuba un acontecimiento histórico en pleno siglo XXI: la II Cumbre de la CELAC. 

Jesús Morales Cisneros es de la República Bolivariana de Venezuela, y para él este concierto de voces por la unidad “es la cristalización de los sueños de Martí y Bolívar, de Chávez y de Fidel”.

En esa idea coinciden también los argentinos Franco Cordero y Alana Claudia Montoya, quienes han seguido por estos días muy de cerca los acontecimientos de esta Cumbre de la unidad y la hermandad.

“Es algo trascendente, es ver al fin convertido en realidad el anhelo de Martí de esta integración que tanto necesitamos. Para nosotros esta reunión es una cuestión no sólo política y social, sino un encuentro, dentro de la diversidad, por la solidaridad que tanto necesitamos para hacernos más fuertes y seguir adelante”, expresaron estos futuros galenos del país austral.

“Las luces para el futuro ya están encendidas”, significó el Doctor ecuatoriano Diego Muquinche Guzmán, residente en Medicina General integral y quien culmina su preparación en la Universidad de Ciencias Médicas Serafín Ruiz de Zárate Ruíz de Santa Clara, quien enfatizó “Es una América integrada, un bloque bien apretado, invencible, que jamás habíamos tenido antes”.

Para estos jóvenes, un resultado concreto de esta unidad es la formación que ellos reciben como profesionales de la salud, y en reciprocidad, cuando culminen sus estudios, irán a servir a las comunidades que más los necesitan, como un compromiso de honor con sus pueblos.

El impacto de esta Cumbre llegó hasta jóvenes de otras regiones del mundo, como el paquistaní Junaid Amjad,  quien expresó a esta CMHW: “Es un ejemplo para todo el mundo, como se puede alcanzar el respeto, la igualdad en este planeta. Es una lección que nos aporta Cuba con muchos países de la América. Cuando se comparte, cuando se unen las fuerzas se alcanza una fuerza mayor y siempre trae resultados inmensos. Nos trae mensajes de esperanza, y hay que seguir este ejemplo que hoy nos da esta región”, concluyó.

Estos estudiantes, los Pinos Nuevos del mundo que describió nuestro Martí recuerdan aquella frase del Apóstol que aparece en su Ensayo Nuestra América: “¡Porque ya suena el himno unánime; la generación actual lleva a cuestas, por el camino abonado por los padres sublimes, la América trabajadora; del Bravo a Magallanes, sentado en el lomo del cóndor, regó el Gran Zemí, por las naciones románticas del continente y por las islas dolorosas del mar, la semilla de la América nueva!”