Blogia
Dalia

Este día de enero

Este día de enero

Comienza el año 2014, y todo vuelve a la normalidad, luego de días de festejos, saludos y reencuentros con familiares y amigos, nuevas promesas y el beso y el abrazo a la persona más querida, justamente a las 12 de la noche, cuando decíamos adiós al 2013 y dábamos la bienvenida al 2014.

En las cuadras se quemaron muñecos “para que se llevara lo malo y nos trajera lo bueno”, mientras algunos tiraban cubos de agua a la calle, y casi todos, a pesar de las limitaciones económicas, degustaban la exquisita y bien cubana carne de cerdo asada, el congrí, la yuca con mojo, además de descorchar la sidra, o el ron, o el vino que sirvieron de antesala al rítmico baile y la alegría.

Cuba de fiesta esperó el 2014.

El primero de enero, Raúl volvía a recordarnos que “no cederemos a chantajes ni amenazas” y que, como aseverara Fidel en Santiago de Cuba, hace 55 años: ¡La Revolución sigue igual, sin compromisos con nadie en absoluto, solo con el pueblo!.

Ahora mismo también se piensa en el que decidió emprender su vida en otra tierra, pero con el corazón pegado a Cuba, o el que nos dijo adiós y queda para siempre: los seres queridos que se nos fueron en los últimos doce meses, y otros líderes internacionales que se hicieron tan nuestros, y a quienes también lloramos cuando los sorprendió la muerte, o mejor, la eternidad en este año que culmina.

Hugo Chávez y Nelson Mandela quedaron para siempre en las almas de las personas buenas de este planeta , porque marcaron un antes y un después en sus tierras, en sus continentes y en el mundo.

En los barrios los niños juegan, los trabajadores se alistan para reintegrarse a la actividad laboral, los jóvenes y adolescentes se preparan para entrar nuevamente en sus centros estudiantiles, las personas se saludan en las calles, y todos piensan en que las transformaciones económicas en Cuba deben traernos la mejoría que todos aspiramos.

Todos y todas, apenas sin darnos cuenta, disfrutamos de una nación pobre, pero que nos hace vivir seguros y libres.

Todas y todos amamos esta isla que recibe un 2014 diferente, cargado de cambios, pero con los mismos sueños que hace más de cinco décadas nos hicieron defender una Revolución triunfante que nos trajo la dignidad.

Todas y todos, prestos a comenzar nuevas batallas: el perfeccionamiento del país, la lucha por la libertad de los cinco y el cese del bloqueo económico, la ayuda a tierras hermanas que nos necesiten.

Todas y todos, insatisfechos por lo que nos queda por hacer, pero con la certeza de que solo trabajando y enfrentando nuestros propios errores e insuficiencias, podremos salir adelante.

Todas y todos, soñando en este 2014, con el porvenir, bajo este Sol radiante y este cielo azul y despejado que nos entregaron hace más de un siglo, nuestros héroes y mártires, quienes ofrendaron lo mejor que tenían,  sus vidas, por  esa libertad, por la cual, como nos advirtió el poeta, “habrá que darlo todo”.

Ese es el mayor regalo de esperanza y la promesa que nos encuentra, más unidos que nunca, en este 2014.

0 comentarios